jueves, 30 de enero de 2014

Un futuro con sequías más severas y persistentes para Europa


La sequía se puede definir como una anomalía transitoria en la que la disponibilidad de agua se sitúa por debajo de los requerimientos estadísticos de un área geográfica dada. El agua no es suficiente para abastecer las necesidades de las plantas, los animales y los humanos. Tan solo en Europa, el costo estimado de las sequías durante las últimas tres décadas es de más de 100.000 millones de euros.

Para finales de este siglo, se teme un aumento de las sequías en Europa debido al cambio climático y al incremento del uso de agua. 
Los resultados que apuntan a ese futuro preocupante, han sido presentados públicamente a través de un informe en la revista académica Hydrology and Earth System Sciences.

La investigación muestra que muchas cuencas fluviales (sobre todo en el sur de Europa) presumiblemente serán más propensas a períodos de sequía, debido a los efectos meteorológicos del cambio climático global, a un incremento en la demanda de agua, una población en aumento y al uso intensivo de agua con fines agrícolas e industriales.
Climograma que muestra una gran sequía.
Los autores del estudio exploraron la cuestión de si las temperaturas crecientes y un consumo intensivo de agua podrían causar en Europa sequías más intensas y de mayor duración, y en tal caso cuáles serían las zonas más castigadas.
Esos escenarios reflejan posibles evoluciones del cambio climático hasta el año 2100.

Los resultados de dicha investigación indican que las regiones del sur de Europa serán las más afectadas. Para el caudal mínimo de ríos y arroyos se prevén fuertes reducciones en la Península Ibérica, el sur de Francia, Italia y los Balcanes; los descensos en los niveles de flujo mínimo podrían ser del 40 por ciento. En cuanto a los períodos de escasez de agua podrían incrementarse hasta en un 80 por ciento. Y todo ello solo por efecto del cambio climático, sin contar otros factores.

UNA TORMENTA DE NIEVE AZOTA EL SURESTE DE EU

Los estados de Carolina del Norte, Carolina del Sur, Luisiana, Alabama y Misisipi se encuentran en estado de emergencia por una tormenta de nieve que ha azotado el sureste de EU.
La nieve también causó problemas en el área metropolitana de Washington y de los vecinos estados de Virginia y Maryland, donde numerosas escuelas y universidades retrasaron el inicio de las actividades, mientras que desde Filadelfia a Nueva Orleans el tráfico se ha visto entorpecido por el hielo en las calles.
La tormenta se trasladó a Carolina del Norte y del Sur, pero sus efectos aún se dejaban notar en el área metropolitana de Atlanta (Georgia), donde algunos viajeros se vieron obligados a permanecer hasta 18 horas dentro de sus vehículos.

La tormenta dejó dos terceras partes de Georgia bajo la nieve y el Departamento de Recursos Naturales del estado movilizó personal en vehículos especiales para llevar suministros a los conductores atascados.
La tormenta invernal, poco común en el sur, ha dejado una acumulación de nieve de hasta casi 8 centímetros en algunas áreas al norte de Georgia, mientras que en el Aeropuerto Internacional Hatsfield Jackson, en Atlanta, la acumulación llegó a los 5 centímetros.
La nieve y el hielo llegaron a las playas de Alabama, sobre el Golfo de México, y forzaron a que algunos autobuses escolares retornaran a las escuelas con los niños en Tennesse.
La alerta sigue vigente en Louisiana, donde el Servicio Meteorológico Nacional pronosticó que la máxima temperatura estará por debajo de cero grados centígrados.

miércoles, 29 de enero de 2014

Un nuevo delfín de río descubierto en el Amazonas


En medio del Amazonas -el bosque tropical más extenso del mundo, donde se encuentra más de la mitad de la biodiversidad a escala mundial- discurre un río de más de dos mil kilómetros de longitud, el río Araguaia. Sus aguas, que cruzan la parte central de Brasil y desembocan en el Atlántico, albergan a una especie de delfín de río desconocida hasta ahora, bautizado como el delfín Araguaia (Inia Araguiaensis). LEER MÁS...

viernes, 24 de enero de 2014

Fiesta en los humedales


Los humedales son uno de los biotopos que albergan una mayor diversidad animal y vegetal, además de generar recursos hídricos cada vez más escasos. Tales bondades avalaron la firma del convenio de Ramsar en 1971 y el hecho de consagrar cada 2 de febrero al Día Mundial de los Humedales. Qué mejor que darle un giro avifaunístico apuntándonos a las excursiones diseñadas por SEO/BirdLife, organización decana de la conservación medioambiental en España, coincidiendo con su 60º aniversario.

Las lagunas de Villafáfila (Zamora) atraen por el ave más pesada que vuela sobre la tierra, la avutarda; rodeada de una explosión ornitológica que contrasta con el paisaje cerealista castellano. También parten excursiones de Madrid a los embalses de Valmayor, La Jarosa y Los Arroyos (día 1), y a Aranjuez, Mesa de Ocaña y La Sagra (día 2). Los tinerfeños avistarán chorlitejos patinegros en El Médano (Granadilla de Abona), y serán altas las probabilidades de fotografiar en Corrubedo (A Coruña) especies boreales como el colimbo por las lagunas de Carregal y Vixán.


El lema de esta edición, Humedales y agricultura, tiene su plasmación en la visita el día 2 a la reserva ornitológica de Riet Vell, en el delta del Ebro (Tarragona). Finca de arroz ecológico que tiene como inquilinos al calamón y al avetorillo.
FUENTE: EL PAÍS

lunes, 20 de enero de 2014

LA ENERGÍA DE LAS CIUDADES, UN FACTOR MÁS DEL CAMBIO CLIMÁTICO.

La energía que se desaprovecha en las grandes áreas urbanas del mundo desarrollado tiene una influencia mucho mayor de lo que se suponía en la circulación atmosférica mundial. No se trata solo de que las ciudades sean islas de calor, sino de que el calor residual de las emisiones del tráfico, la calefacción, el aire acondicionado y las industrias producen cambios en la circulación atmosférica global que explican anomalías observadas a miles de kilómetros de las ciudades, pero no explicadas hasta ahora por los modelos de cambio climático.
Investigadores de varios centros estadounidenses han unido sus fuerzas para incorporar el calor que resulta del consumo de energía de origen fósil a los modelos de clima globales. Han encontrado que los efectos de este factor, tales como el calentamiento en invierno de hasta 1 grado centígrado en Rusia, el norte de Asia y la zona central de Canadá son similares a los que se han observado en la realidad durante la segunda mitad del siglo XX. También explica el enfriamiento de hasta un grado centígrado que se ha observado en Europa occidental durante el invierno.
“La quema de combustibles fósiles no solo emite gases de efecto invernadero sino que también afecta directamente a las temperaturas debido al calor que escapa de fuentes como edificios y automóviles”, explica Aixe Hu, del Centro Nacional de Investigación Atmosférica, (NCAR), que ha participado en el estudio, publicado en Nature Climate Change.  
Dado que las mayores concentraciones urbanas se encuentran en el hemisferio Norte, el efecto se produce sobre todo en esta mitad del mundo. Además de las zonas citadas, en China hay un calentamiento de medio grado en invierno, mientras que en otoño el enfriamiento afecta extensamente a Rusia, Canadá, el medio oeste de Estados Unidos, mientras que se calienta el norte de Europa. Entre los cambios observados en la circulación atmosférica está un desplazamiento hacia el ecuador de la corriente de chorro invernal de latitudes medias, la que afecta a Europa occidental.
Aunque el efecto neto sobre las temperaturas medias globales de la energía emitida por las grandes áreas urbanas es prácticamente despreciable, a escala regional este efecto es cuantificable en algunas zonas. El calor residual total producido por la actividad humana constituye solo el 0,3% del calor total transportado en latitudes altas por las circulaciones atmosférica y oceánica, señalan los expertos citados por el NCAR.

domingo, 19 de enero de 2014

DEVORADOR DE FANTASÍAS


Vista satelital de la duna que está a punto de cubrir la ciudad de Mos Espa

Es un hecho: la ciudad que vio crecer a Luke Skywalker y donde su padre, Anakin, competía en carreras de vainas podría llegar a desaparecer. ¿Cómo? Debido al avance letal pero silencioso de una duna en forma de media luna de 90 metros de ancho, también conocida como barján.
El escenario de la "Amenaza Fantasma" (1999), una de las entregas de la afamada saga "La Guerra de las Galaxias", está a punto de ser engullida por la arena. Avanzando unos 14 metros al año, esta duna hambrienta está, sin embargo, reduciendo su avance ligeramente gracias a las corrientes de aire que provienen de los edificios del decorado y a los aproximadamente 100000 turistas que cada año lo ponen a prueba de suela. Según Ralph Lorenz, de la Universidad Johns Hopkins, dentro de un lustro, el escenario quedará sepultado por completo. Es posible, sin embargo, que la fantasía vuelva a emerger.

"PRIMAVERAS ESPACIALES"


La disminución del ozono puede provocar también cáncer de piel en humanos y dañar a los animales
No sólo en la Tierra hay invierno,otoño, verano o primavera. Según Jim Green, de la NASA:  "Allí donde existe una atmósfera hay estaciones". Lo único que ocurre es que son diferentes en cada cuerpo celeste.
Los solsticios y equinoccios marcan el cambio de las estaciones, y la rotación, la órbita, la distancia del Sol y la oblicuidad (la inclinación del eje) determinan los cambios meteorológicos.
Los anillos de Saturno, por ejemplo, no proyectan sombra durante los equinoccios. En su mayor satélite, Titán, los chaparrones de primavera son de metano y pueden prolongarse varios años terrestres. El invierno trae a Marte nevadas de dióxido de carbono, y en Mercurio prácticamente no hay cambios estacionales, debido a su delgada atmósfera y su lenta rotación, equivaliendo un día a dos años.
En plutón, cuando alcanza su punto más alejado del Sol (invierno), su atmósfera se congela.

lunes, 13 de enero de 2014

El hielo llega a las cataratas del Niágara

La invasión polar comenzó en el Medio Oeste durante la primera semana de Enero después del paso de una tormenta invernal bautizada como "Hércules", que había cubierto con sus nevadas desde Nueva Inglaterra a Michigan.

La intensa ola de frío que azota desde hace dos semanas a Estados Unidos y Canadá ha congelado las enormes y
fuertes corrientes de agua de las cataratas del Niágara, en la frontera de esos dos países. La superficie de las cataratas ronda temperaturas inferiores a los 20 grados por lo que el caudal del río ha quedado parcialmente helado. Algunas partes de las cataratas del Niágara se han convertido en auténticos puentes de hielo, incluida la cornisa del precipicio de 53 metros de altura.



En décadas, el norte y noreste de Estados Unidos no había experimentado temperaturas tan bajas, llegando a los 30 grados bajo cero. El vórtice polar que causó temperaturas bajo cero en los 50 estados de EEUU comenzó a retirarse el día 10 de este mes. 
Por vórtice polar entienden los meteorólogos una circulación de vientos en torno a la región ártica que normalmente mantiene el frío contenido en esa zona, pero que en esta ocasión, debido a un debilitamiento, ha dejado bajar grandes masas de aire frío desde Canadá hasta abarcar la mayor parte de EEUU.

Dicho acontecimiento meteorológico se va dejando al menos 21 muertos y pérdidas que se calculan en unos 5.000 millones de dólares. Las aerolíneas llegaron a cancelar la mañana del 10 de Enero 1.700 vuelos y otros 2.000 estaban demorados en aeropuertos desde California a Nueva York, aunque representó una mejora en relación con tres días antes, cuando se cancelaron 3.286 vuelos y más de 9.660 tuvieron demoras.
La ola de frío, que afectó principalmente a un tercio del país y a unos 187 millones de
personas, obligó al cierre de escuelas, universidades, empresas y oficinas gubernamentales que, lentamente, retornaban a las actividades.




El Servicio Meteorológico Nacional indicó que persistían las temperaturas por debajo de cero grados en una vasta región desde Nueva Inglaterra a Arkansas y desde Virginia a Dakota del Norte.                     

En Boston, Massachusetts, los meteorólogos advirtieron de que el frío polar se comenzó a retirar gradualmente de la región hacia el fin de la semana, pero le seguirán fuertes lluvias. 

jueves, 9 de enero de 2014

La atmósfera del planeta vecino cumple una rotación completa en cuatro días.

La superrotación de la atmósfera de Venus hace que los vientos a gran altura den la vuelta completa al planeta en solo cuatro días. Y esos vientos se están acelerando, según los análisis de dos equipos científicos que han utilizado la información captada por la sonda europea Venus Express, en órbita de ese mundo, el más cercano a la Tierra. En latitudes bajas, los vientos en altura han pasado de unos 300 kilómetros por hora, en 2008, a casi 400 kilómetros por hora en 2013. “Es un incremento enorme [de velocidad] en la ya rápida rotación de la atmósfera”, destaca Igor Khatuntsev (Instituto de Estudios Espaciales, Moscú), líder de uno de los equipos. “Esa variación tan grande nunca se había observado en Venus y todavía no entendemos la causa”.
Aunque es similar a la Tierra en tamaño, Venus es un infierno en lugar de un mundo confortable para la vida. Con una atmósfera extremadamente densa, rica en dióxido de carbono, el efecto invernadero es muy potente allí y en la superficie la temperatura ronda los 460 grados centígrados, suficiente para fundir el plomo. Pero, además, la densa capa de nubes amarillentas oculta el suelo.
Khatuntsev y su equipo, por un lado, y Kouyama y sus colegas, por otro, han utilizado las imágenes captadas por la sonda Venus Express, de laAgencia Europea del Espacio (ESA), para estudiar la dinámica de la atmósfera durante 10 años venusianos (seis años terrestres), utilizando determinados patrones distintivos en las nubes. Ambos grupos han dado a conocer sus resultados en la revista Icarus.
La Venus Express, que partió de la Tierra en noviembre de 2005, llegó a Venus en abril de 2006. Está en órbita polar del planeta acercándose hasta 250 kilómetros del suelo sobre el polo Norte, y alejándose hasta 66.000 kilómetros sobre el polo Sur. Desde esta órbita tan elíptica la sonda automática logra una visión muy buena del hemisferio Sur de Venus en su conjunto y permite tomar imágenes de alta resolución del hemisferio Norte, informa la ESA.
El equipo ruso explica que, para esta investigación del viento venusiano, ha analizado, mediante un método manual de seguimiento de patrones, las imágenes obtenidas durante 127 órbitas y, mediante un método automático con ordenador, las tomas de 600 órbitas.