Ontake es el segundo volcán más grande de Japón, su violenta erupción a causado unos 30 muertos y decenas de personas singuen desaparecidas. Según la información que ha dado la policía, encontraron 31 cuerpos de senderistas que en el momento de la erupción estaban cerca del cráter y éstos sufrieron un paro cardiorrespiratorio, aunque las autoridades por el momento no quieren confirma una muerte oficial hasta que no sean revisados correctamente un médico. Todas las personas que han fallecido eran escaladores que quedaron inconscientes, tal vez por la inhalación de humo tóxico y ceniza o por ser golpeados por todos los escombros que escupe el volcán. También conocemos que hay unas 45 personas desaparecidas después de que éste volcan de 3.067 metros entrara en erupción mientras cientos de personas se encontraban en él, muchas de estas personas pudieron bajar por su propio pie y otras han tenido que ser rescatadas por el Ejército de Japón.
Es muy difícil recuperar los cuerpos que están situados más cerca de la cima debido a sus constantes erupciones, por lo que muchas de las operaciones tuvieron que ser suspendidas más de una vez, ya sea por el aumento de los niveles de gases tóxicos o por la falta de luz. Las autoridades tienen la esperanza de que la mayoría de las personas desaparecidas hayan logrado alcanzar alguno de los refugios que podemos encontrar en las laderas del volcán.
Este volcán se creía extinto hasta el año 1979, cuando en una cadena de erupciones expulsó unas 200.000 toneladas de cenizas y escombros. El volcán se volvió a activar en 1984, 1992 y 2007, aunque fueron erupciones mucho más leves.
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