En las primeras 48 horas lo vieron 100 millones de personas. En 72 horas, ya habían accedido a él 156 millones solo en una de las páginas más populares de intercambio de vídeos en China, Tencent QQ. El documental Bajo la cúpula, de la periodista de televisión china Chai Jing, que ha causado sensación en su país con su fuerte carga emocional, ha reabierto el debate sobre la grave contaminación medioambiental y, sobre todo, en torno a lo que se puede hacer para combatirla de veras.
Chai grabó el documental después de que a su hija recién nacida los médicos le detectaran un tumor benigno que ella atribuye a una exposición prolongada a la contaminación.“Nunca había tenido miedo de la contaminación y nunca usé mascarillas. Pero cuando tienes esta pequeña vida en tus manos, su respiración, alimentación y bebida son responsabilidad tuya. Es cuando empiezas a tener miedo”, declara en el vídeo la periodista, que invita al público a no permanecer pasivo ante el problema.
El documental culpa de la contaminación a circunstancias como el gran consumo de carbón, la principal fuente de energía en China.
Pero va más allá. Denuncia también la resistencia de las grandes
petroleras estatales, que amenazan con cortar el suministro si se les
fuerza a mejorar la calidad de la gasolina. O la falta de poder de los
funcionarios encargados de hacer cumplir las leyes de protección
medioambiental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario